¿Qué es una discapacidad?
Se conoce por discapacidad a las limitaciones físicas, psíquicas, intelectuales, sensoriales o aquellas derivadas de enfermedades graves, cuyas secuelas afectan a las actividades cotidianas del día a día.
Las actividades que una persona debe realizar en su vida diaria se utilizan para determinar los diferentes grados y porcentajes de discapacidad.
Éstas son algunas de las actividades que sirven para determinar el grado de discapacidad de una persona: el aseo o higiene personal, subir y bajar escaleras, vestirse y desvestirse, comunicarse y realizar actividades sociales y de ocio, comer, capacidad para uso de medios de transporte, etc.
¿Qué determina el grado de discapacidad?
La discapacidad en España viene regulada por el real decreto legislativo 1/2013, de 29 de noviembre, siendo quien regula la calificación legal de discapacidad, así como el que establece los baremos aplicables y la determinación de dicho reconocimiento y procedimientos a seguir a través de los diferentes órganos competentes
¿Qué requisitos debo cumplir para obtener un grado de discapacidad?
Para obtener un grado de discapacidad es importante aclarar que a la hora de determinar un grado u otro se tienen en cuenta sobre todo cómo las secuelas de tu patología afectan a tu vida diaria en función de tus circunstancias personales, tales como, la edad, situación económica, familiar, etc.
¿Qué es el certificado de discapacidad?
El certificado de discapacidad es un documento administrativo mediante el cual se acredita el reconocimiento del grado de discapacidad. Este certificado te otorga acceso a diferentes beneficios y derechos según tu grado de discapacidad, ayudándote a satisfacer las diferentes necesidades personales y/o sociales que se te presenten.
¿Cuáles son los diferentes grados de discapacidad?
A continuación te indicamos los diferentes grados de discapacidad:
- Grado 1: discapacidad nula. Los síntomas o secuelas son mínimos y no justifican una disminución de la capacidad de la persona para realizar las actividades de la vida diaria.
- Grado 2: discapacidad leve. Los síntomas o secuelas justifican alguna dificultad para llevar a cabo las actividades cotidianas
- Grado 3: discapacidad moderada. Los síntomas o secuelas causan una disminución importante en la capacidad de la persona para realizar algunas de las actividades de la vida diaria, siendo independiente en las actividades de autocuidado.
- Grado 4: discapacidad grave. Los síntomas o secuelas causan una disminución importante de la capacidad de la persona para realizar la mayoría de las actividades cotidianas, pudiendo afectar además a la realización de las actividades de autocuidado.
- Grado 5: discapacidad muy grave. Los síntomas o secuelas imposibilitan a la persona la realización de las actividades cotidianas, necesitando además asistencia de una tercera persona.
¿Qué porcentaje debo presentar para obtener un grado de discapacidad?
El grado de discapacidad se presenta en un porcentaje y es reconocido a partir del 33%, que es el mínimo requerido para determinar la condición de una persona con discapacidad. Dicho grado deberá ser certificado por el órgano competente de cada Comunidad Autónoma, que emitirá la resolución correspondiente sobre el grado de discapacidad. Dicha resolución tendrá validez en todo el Estado español, si bien debe tramitarse la debida homologación en cada Comunidad Autónoma en la que vayas a residir.
A las deficiencias permanentes que originan una discapacidad moderada les corresponde un porcentaje comprendido entre el 25% y el 49%. Si las deficiencias permanentes producen una discapacidad grave, el porcentaje que corresponde estará comprendido entre el 50% y el 70 %. Se considerará discapacidad cualificada o gran discapacidad, si el grado de discapacidad alcanza el 75%, y la persona precise de la asistencia de una tercera persona para realizar las tareas básicas de la vida cotidiana
Podemos encontrar excepciones a esta regla general, como la que determina los grados de discapacidad intelectual, debido a que las actividades diarias se ven afectadas por algún problema, daño o retraso cognitivo, neurológico o intelectual. Por otro lado, la discapacidad por trastornos vasculares que son los provocados por los infartos cerebrales debido a la falta de riego sanguíneo.
Si tienes cualquier consulta sobre los grados de discapacidad o quieres saber cómo solicitarlo, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.